Que yo recuerde, siempre he guardado las telas de prendas que me gustaban y que desechaba porque se me habían quedado pequeñas, se habían estropeado, o por lo que fuera.
Me dedicaba a quitarle los botones y a hacer retales, que bien dobladitos guardaba en una caja, siempre pensando en que algún día haría algo con ellos.
Me gustan mucho los estuches de bolígrafos, neceseres, monederos redondos y triangulares, fundas porta pañuelos, estuches para auriculares, fundas para el e-book y el i-pad, carteras, tarjeteros,etc. Todo ellos pequeños artículos que me parecen preciosos.
Después de ver muchos tutoriales y dudar más, este verano, me he liado la manta a la cabeza y me he puesto a ello. Sólo sabía que tenía que intentarlo.
Como siempre que se inicia una actividad nueva hay cosas que se hacen especialmente difíciles. Todo parece muy fácil hasta que te pones a ello. En este caso lo que más quebraderos de cabeza me ha dado ha sido la forma de poner las telas para colocar las cremalleras.
Ahora, al menos, soy capaz de poner una cremallera con tela exterior y forro, hacer las bases para que la pieza asiente, poner los deslizadores de las cremalleras, sacar y hacer patrones y unas cuantas cosas más que nunca está de más saber.
Eso si, he roto unas cuantas agujas, me he dado unos pinchazos de campeonato y ha habido diseños a los que he renunciado porque no acababan de salirme.
Lo mejor de todo es que me he divertido un montón, decidiendo primero qué diseño hacer luego qué telas usar y por último haciéndolo.
2 comentarios:
Es una idea estupenda creo que ha merecido la pena los pinchazos y los quebraderos de cabeza para poner las cremalleras.....y sobretodo el reciclaje de esas telas tan bonita te felicito por ello.
Besos
Enhorabuena por haber superado tu propio reto, te han quedado preciosas todas tus bolsitas. Un beso grande
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